Antes de decidir ser padres la gente continuamente nos repetía a modo bucle ¨aprovechen ahora mientras puedan, cuando tengan hijos no van a poder seguir viviendo así¨.
Cuando me quedé embarazada ésta frase se intensificó hasta el punto de ¨ya se hicieron la idea ¿no? porque lo más lejos que irán es a la Península¨.
Obviamente teníamos muy claro que sí o sí queríamos seguir haciendo escapadas, pero mentiríamos sino dijésemos, que ya no era una razón nuestra, ahora dependía de que todo con nuestro enano saliese bien.